La ciudad romana de Bath, al suroeste de Inglaterra, está considerada como uno de los lugares más bonitos del mundo, y por su belleza arquitectónica fue declarada Patrimonio de la Humanidad en el año 1988.
Ubicada sobre el río Avon, es también un importante centro cultural, con un centro histórico fascinante repleto de callejuelas con más de 700 tiendas, sus famosos Baños Romanos, cinco teatros y el único balneario de Inglaterra con aguas termales. Cuenta con 85.000 habitantes.